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jueves, 4 de febrero de 2010

EL VINO: MITOS Y REALIDADES

Mucho se ha hablado de lo benéfico que es para la salud del adulto humano el consumo moderado del vino tinto, tanto que existen estudios serios que demuestran la capacidad antioxidante de los polifenoles que se encuentran en él. También es bien sabida la acción de estos polifenoles como anticancerígenos y como coadyuvantes en tratamientos para personas con cardiopatías, problemas de colesterol, triglicéridos, etc. Son los diferentes tipos de polifenoles los que determinan la capacidad antioxidante del vino y están estrecha y hasta directamente relacionados con la variedad de la uva, el área de producción, los procesos de vinificación, las técnicas agrarias, entre otros.
Pero ¿Qué son los polifenoles?
Son antioxidantes naturales presentes en el aceite de oliva, o en las sustancias amargas que provienen del hollejo y semillas de las uvas (taninos) o de las maderas de las barricas en donde se fermenta el vino. Estas sustancias químicas también se encuentran de forma natural en las plantas que favorecen la producción de alcoholes, estas plantas utilizan estos polifenoles para resguardarse de las bacterias ya que poseen virtudes bactericidas.
Los polifenoles también se encuentran en alcachofas, café, té, castañas, bayas, cerveza, chocolate, granadas y otros más.

¿Tan, tan benéficos? Ahora los contras.
Cuando comes o bebes un producto rico en taninos la lengua se torna rasposa y esto impide que la saliva envuelva bien los alimentos; esto puede afectar tu buena digestión.
Otro aspecto negativo de los vinos que se ha venido estudiando en los últimos años y ha despertado gran interés es la presencia de aminas biogenas, compuestos nitrogenados que se forman durante el proceso de las fermentaciones alcohólicas y/o malolácticas del vino. Ingerir bebidas alcohólicas que presentan elevadas concentraciones de aminas (histamina y tiamina principalmente) puede provocar síntomas indeseables como reacciones alérgicas, cefaleas (dolor de cabeza, migrañas, etc.), hipertensión, alteraciones en el ritmo cardiaco, diarreas, entre otras.
Esta es la información, ahora ya sabes y puedes tomar decisiones que te hagan sentir sano, feliz y en equilibrio.
¡Salud!

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